miércoles, 28 de julio de 2010

Dejados atrás (27)

E) La informalidad

Al igual que tantas otras organizaciones en Latinoamérica, las iglesias son profundamente informales. Suelen funcionar a la volada, como sea, tratando de subsistir sin planificación ni visión de largo plazo. La mayoría de sus prácticas rozan lo irregular. Desde el lado económico, estilan no pagan beneficios sociales (como no los pagan las empresas informales), no provisionan para la jubilación (hermanos, Dios proveerá, y más si es para los llamados por Él), hay atrasos en los sueldos que, para peor, suelen estar por debajo del salario mínimo aunque a veces están en el otro extremo. No hablemos del pago de impuestos municipales o gubernamentales, o los simples pagos de los servicios básicos, para los cuales hacen milagros. Las finanzas son un caos total, pero se presupone siempre la confianza en Jehová Jireh que entregará todo lo necesario. En ocasiones se teologiza, hablando de la falta de fe o, tal vez, de la doctrina de la prosperidad que han manipulado profundamente a miles de congregaciones, instruyéndolas a que den mucho dinero para que los laicos puedan ser ricos. Hay cosas tan anormales como las que vive el personal adosado a una iglesia, como las secretarias, conserjes u otros. Los pastores, al menos, tienen una base escritural neotestamentaria cuando se dice que “digno es el obrero de su salario”, tal cual lo escribió el apóstol Pablo. Los demás, en cambio, no tienen nada que extraer de la Biblia de manera explícita y, además, algo adicional les juega en contra: la lógica del “servicio”. ¿A qué me refiero? Que su salario se recategoriza y pasa al rubro de “ofrenda”, por lo que ningún beneficio les corresponde. Así, también, se justifica el pagar sueldos menores al mínimo establecido por ley. Realmente lo que hacen –a los ojos de esas iglesias- no es un trabajo tal cual lo harían en una empresa cualquiera. Es un servicio para Dios que tiene lugar en la iglesia local. ¿Visión errónea? Evidentemente. Por supuesto, así no es en todas partes, pero la práctica campea sin control. Son los derivados de la informalidad.

La natural tendencia a la autocracia pastoral, el orgullo y el control que sofocan el ambiente desde Tijuana a Ushuaia, se aprovechan de esta característica tan particular de nuestras sociedades, generando estructuras inequitativas que les brindan grandes beneficios. Es como Alberto Fujimori en la década de los noventa. Aprovechando la coyuntura de lucha contra la subversión, la oposición congresal, el descontento popular y la debilidad de las instituciones peruanas ―una suerte de informalidad estatal y política―, cerró el Congreso en 1992 ―con un noventa por ciento de aprobación de la ciudadanía al comienzo, yo entre ellos―. Lentamente, comenzó un proceso de copamiento de las instituciones: el Congreso, el Poder Judicial, las Fuerzas Armadas, los medios de comunicación, los jurados electorales, todo apoyados por la corrupción más grande de nuestra historia: la fujimontesinista, que hoy quiere volver al poder bajo el amparo de la hija del líder, hoy condenado por delitos de lesa humanidad. Todo se hundió tras el fraude electoral del 2000 y la evidencia de la putrefacción política que todo el Perú vio en un video donde Vladimiro Montesinos compraba conciencias y votos a favor de Fujimori, obligando al dictador a renunciar vía fax desde su otra patria, Japón, donde llegó a postular al poder legislativo. En las iglesias es lo mismo. La fragilidad institucional permite a los autócratas, poco a poco, copar los espacios, arrebatar el control que los laicos podrían tener, para finalmente hacer sus propios feudos, amparados en una exégesis bíblica deficiente. Lo que agrava todo es la necesidad de las masas latinoamericanas por un liderazgo fuerte, aplastante, que nos marque el camino y nos diga qué hacer. Una simbiosis perfecta que en las iglesias junta a un roto con un descosido. Todos felices en la distorsión de la disfuncionalidad, jubilosos en el fango, en el hedor del chiquero.

El pastor titular pasó por un proceso similar. Casi sin que la gente se de cuenta, cambió la manera de administrar la iglesia, pulverizando el consistorio ―donde laicos comprometidos podían contrapesar su poder― para pasar a un esquema vertical de administración, donde él decidiría todo, determinando un cuerpo administrativo compuesto por laicos, pero que sólo tendrían capacidades operativas, no políticas. Es curiosa la manera de argumentación de los cambios. A los laicos de la iglesia nos decía que “la iglesia no es una democracia sino una teocracia”, argumento que nunca me dejó satisfecho aunque se enseñaba mayoritariamente en toda la denominación. Con frecuencia discutí sobre él con varias personas. Sin embargo, en otras esferas ―léase, entre el gremio pastoral o ante laicos maduros― el discurso era distinto. Se esgrimía que la democracia en la iglesia es algo que se debe enseñar, algo que se debe aplicar paso a paso. Por ello, las normas de la denominación sugieren un modelo de control completo de los pastores titulares que permita enseñar a los laicos cómo debe ser la democracia para instruirlos y, después, cambiar la forma de gobierno. O sea, se hablaba de una temporalidad del control absoluto. Pero ese argumento es ridículo si los pastores no están dispuestos a entregar el control cuando la iglesia esté “lista” para esquemas democráticos. Es como decir que te enseñarán democracia con dictadura. Esto podría funcionar en otras realidades, pero aquí, donde muchos líderes religiosos son adictos al poder y el control, es imposible. El esquema está destinado al fracaso.

El poder total agregado a la informalidad trae como resultado repúblicas bananeras, casi al estilo del Otoño del Patriarca de García Márquez. Puedo tomarme la libertad de hacer un símil eclesiológico y hablar de iglesias bananeras, donde se hace lo que al líder se le da la gana, por encima de todo, y donde las normas y leyes han sido dadas o interpretadas a la medida. Por ejemplo, es pasmosa la falta de transparencia en la iglesia. En las asambleas, las cifras se dan en números agregados, instruidos los expositores a no dar las cifras en detalle. Nunca entendí el por qué. Hay temas tabú de los que nadie habla o interroga. Por ejemplo, ¿cuánto gana el pastor titular? ¿Por qué los miembros de la iglesia, que aportan diezmos y permiten la subsistencia de la iglesia, no pueden saber eso? ¿Qué ingresos adicionales recibe el pastor titular en sus viajes como conferencista o como director de una organización paraeclesiástica? Me pueden decir que eso es irrelevante ya que esos ingresos son independientes a los que la iglesia le paga al pastor titular, pero si él trabaja a tiempo completo para la congregación, entonces está recibiendo un sobresueldo o, en otras palabras, se le está pagando por un servicio no brindado o entregando a alguna otra organización. Un sueldo por no trabajar, tal cual lo reciben malos funcionarios públicos que reciben dos o tres sueldos de tiempo completo. ¿Cuánto ganan los pastores asistentes? ¿Por qué la gran diferencia con el sueldo del pastor titular? ¿Cuánto se gasta por administración? Si yo pago, ¿Por qué no tengo capacidad de decisión? ¿Se les paga a los pastores-misioneros que colaboran con la iglesia? Si no es así y si la iglesia crece, ¿Por qué no traer más pastores, por qué una iglesia del mismo tamaño y más pobre tiene más pastores que la nuestra, en teoría más pudiente? ¿Quién decide el monto de los sueldos? ¿Por qué es el pastor titular? ¿No es un riesgo que tome decisiones monetarias? ¿Por qué se subsidia casa, auto y estudios para los hijos? ¿No es mejor que, como el resto de la gente, directamente sea el clero el que pague por sus gastos, sin ningún tipo de subsidios? ¿Por qué el pastor titular tiene que decidir por todo los ámbitos de la iglesia? ¿Quién controla las decisiones del pastor titular? ¿A quién acudimos si una de sus decisiones nos parece injusta, errada, condicionada? ¿Qué hacemos si no hay nadie a quién acudir? ¿Estamos perdidos? ¿Quién limita su espiritualización? ¿Quién evalúa sus enseñanzas teológicas? ¿Existen mecanismos mediante los cuales podemos prescindir, de ser necesario, de los servicios del pastor titular, el pastor asistente o el pastor de jóvenes? ¿Existen mecanismos por los cuales podamos cambiar las normas denominacionales? Existe una falta de transparencia tremenda, y esto es por lo endeble de las políticas, criterios y normas: es el pastor titular que lo decide todo. ¿Existe un estatuto de la iglesia local? ¿Está a disposición de los miembros? ¿Quién estableció el estatuto? ¿Estamos en la capacidad de cambiarlo? ¿Quién representa a los laicos en las asambleas denominacionales? ¿Nadie? ¿Por qué es así? Resumiendo todo, ¿Podemos hacer algo si un pastor se apodera de una iglesia local? ¿Podemos hacer algo si un grupo de pastores se apodera de una denominación? La respuesta siempre debe ser sí, aunque por ahora lamentablemente es no. Todo funciona informalmente, al margen de leyes o normas, sin control, a merced de la voluntad de un(os) iluminado(s). Y ya se sabe que si se tiene todo el poder… el riesgo de corrupción se incrementa. Cuestiones irregulares ya se han dado. ¿Se esperará a que las circunstancias empeoren? ¿Creen que el nombrar como vitalicio al pastor titular contribuirá a solucionar los impases? Nuevamente la respuesta es no. Los cambios profundos se hacen necesarios: la iglesia los merece. La missio dei los requiere. El futuro los demanda.

7 comentarios:

Daskalos Amauta dijo...

Abel:

Mi profesor James A. Brickley decia que en toda organizacion existen las tres patas del banco ("three legs of the stool") y son: Evaluación de Resultados (Performance Measures), Derechos de Decisión (Decision Rights) y el Sistema de Recompensa (Reward system). Todos estos tienen que estar alineados para que la organizacion este en equilibrio. Una persona sola no puede determinar estos tres componentes y por eso es necesario lo que aca llaman "Checks and Balances", es decir, de otro grupo de personas que fiscalice y puedan tener en mente los tres componentes. Lamentablemente, cuando una sola persona tiene en su poder los decision rights todo se desequilibra. He visto esto pasar en iglesias aca en USA. Yo pienso que como lideres, no se deben olvidar que son parte de un cuerpo y no la cabeza (ya que Cristo es la Cabeza).

Abel dijo...

Pues sí, Daskalos. Pasa lo mismo en donde trabajo: todo se basa en la repartición de poderes entre las distintas áreas, donde ninguna persona acumula todo el control, sino que se contraponen las unas con las otras, generando un equilibrio. Lamentablemente los "checks and balances" no se dan en organizaciones eclesiásticas. Pero debería, la verdad.

Gracias por tu comentario.

Un saludo,

Anónimo dijo...

¡Con razón! en los últimos tiempos el "evangelicalismo" se queja tanto del subsidio que recibe la iglesia católica, ellos también quieren su "ayudadita". En cuanto a esa congregación en particular, una vez que el "feligrés" es bautizado, no te dan la mano para felicitarte, sino te dan tu "número" de diezmo y punto, "tarea cumplida" contigo. Así mismo debe haber ocurrido con la estructura fariséica. Saludos: Carolina.

Abel dijo...

Me hiciste recordar, Carolina, que algo así pasó conmigo: me bauticé y me dieron mi número de diezmo (el 39, aún lo recuerdo), como señal de que ya era un miembro oficial de la iglesia. Es verdad que allí no quedó todo (se podría decir que no se "olvidaron de mi") pero me acordé de todo eso al leer tu comentario.

Muchos pastores mueren en Perú por la ayuda estatal tal cual la reciben los católicos. He estado en foros donde los he escuchado defendiendo el subsidio. Por supuesto, he expuesto en contra... ese es un largo tema.

Aprovecho el comentario para colocar un enlace que mi amigo Anyul me dio: http://anyulled.blogspot.com/2008/08/huellas-del-clericalismo-en-las.html Es un excelente texto de Christian Schwarz respecto a los pastores multiusos.

Un saludo,

Anónimo dijo...

"Diezmo, luego existo"

Abel dijo...

Muchos miembros del clero estarían de acuerdo con esa afirmación. En la práctica es algo así: "Diezmo, entonces, tienes ciertos derechos en la iglesia".

paul dijo...

paypaluk.net http://www.paypaluk.net
Designersunglas http://Designersunglasses-glasses.com
discountherve http://www.discount-herve-leger.com
louboutinshoes http://www.louboutinshoes-discount.com
mbt-on-sale http://www.mbt-on-sale.com
ghdprice http://www.ghdprice.com
ed hardy sale http://www.hardy-shirts.com
cheapherveleger http://www.cheap-herve-leger.com
mbtshoeswomen http://www.mbtshoeswomen.com
Therve Leger http://www.discounthervelegerdress.com
cardy ugg http://www.ugg-cardy.com
ed hardy http://www.cheap-ed-hardy-clothing.com
handbagspaypal http://www.handbagspaypal.com
ptfashion http://www.ptfashion.com
cnetshopping http://www.cnetshopping.com
mbt-order.com http://www.mbt-order.com
fashion-ghd.com http://www.fashion-ghds.com
louboutinshoes-discount.com
cheap-herve-leger-dress.com
ugg-uk-australia.COM